Desde Palermo, Laura nos cuenta que es bailarína y modelo pero también es go go dancer. "Hace un año y medio que hago esto. Yo estaba bailando en un boliche con amigos y ví lo que hacían las go gos, y dije: 'quiero hacer eso'. Al año lo logré", cuenta. "Hay que tener carísma, ser deshinibída, que no te importe estar con poca ropa , tener amor a la música electrónica y que te guste que te vean bailándola". Nosotros le pedimos que nos haga un bailecito previo. ¿Y ese apellido? ¿Petite? "Es un nombre artístico, bah, en realidad es por Facebook, si bien algunos me llaman así porque no quería poner mi apellido real y como estaba estudiando francés, leí Petite -pequeña- y me gustó". Nosotros pensabamos que era por otra cosa, y repreguntamos. "No tiene connotación sexual, pero sí alguna vez me jodieron con eso. Igual, el sexo oral, es lo que siempre me elogian", confiesa. ¿La entrega Laura es total?: "Una vez que me conecto con quien estoy en la cama, vale todo. Sólo necesito esa unión para sentirme cómoda y me suelto. Por lo general es con gente que conocés hace tiempo, pero no necesariamente. Si me gusta el hombre le busco la vuelta" y nos asegura que si no logra ese estado, busca conectarse sola para pasarla bien. "Me calientan los hombres seguros de si mismo, esos que los ves y sabes que te agarran y te dan vuelta. Que sepan lo que quieren y lo demuestren", describe. Nosotros al toque le proponemos de todo. Y con las chicas? "Estuve sola con otra chica pero no me gustó. En trío con otro hombre fue mejor, la mujer como complemento funciona muy bien. Me falta probar con dos hombres". ¿Te queda algo más por cumplir? "Me divertiría hacerlo en una pileta con mucha gente y que nadie se de cuenta, o bueno, quizas alguien lo note", nos ratonea. Este finde armamos otra vez a la pelopincho.
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