A fines de agosto fuimos partícipes de la Tercera Feria Medieval cordobesa. Con armaduras, artesanias, batallas, comidas y bebidas típicas, en el predio se vivió una jornada con clima de medioevo en pleno siglo XXI. El predio de la Asociación de la Familia Piamontesa (Barrio Quebrada de las Rosas), fue una vez más el lugar elegidos por organizadores del evento, la Asociación Córdoba Recreación Medieval, fanáticos de esa etapa histórica. Si pensás que los pibes son unos frikis que se disfrazan y nada más, te equivocás. Son muy profesionales para recrear cosas de aquella época. Preparan recetas legendarias (recomendado el cerdo a las brasas), ofrecen cerveza artesanal, vinos especiados y absenta (ese líquido verde que con dos tragos ya te imaginas que tenés a Astérix y Obelix tomando birra al lado tuyo). Además ellos mismos crean sus propias armaduras, armas y aunque estás en Córdoba el último cuarteto de La Mona Gimenez no suena. Con instrumentos de aquellos años tocan música acorde al ambiente (flauta y arpa a la orden).
En la competencia de las batallas, todo esta reglamentado, desde los espesores del casco, la cobertura, el peso y tamaño de las armas. Todo tiene que estar en las proporciones exactas. En lo único que se permite cambiar es el uso de hierro, en lugar del acero templado original ¿La causa? el precio. Importar una armadura cuesta alrededor de 3500 dólares y los pibes serán fanáticos pero no giles, y como buenos argentinos se la rebuscan. "Lo atamos un poco con alambre, nos cosemos la ropa, trenzamos la cota de malla, y por dos mil pesos nos fabricamos nuestra armadura", dice Marcelo A., uno de los participantes.
Al evento fueron más de 1300 personas, algunos curiosos, varios aficionados, y otros verdaderos fanáticos, como la gente del club Acero y Sangre que este año compitieron en el mundial: el Battle of the Nations de la Historical Medieval Battle que se hizo en abril, en Francia. "Nos volvimos rápido como la selección en Corea-Japón, pero nosotros no eramos banca", dicen los cordobeses, vestidos como cruzados.
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