Por Hernán Soto
La chica H del día: Daniela Basadre
En 1967 aparecía en la televisión ponja Meteoro, o mejor dicho "Mach Go Go Go". Ahí conocimos a la que posiblemente es la familia más fierrera de la historia de la animación. Ahora, a nivel nacional, nosotros tenemos una versión en carne y hueso: Los Carvotta, un clan argento que lleva la pasión por los fierros en la sangre y la transmite de generación en generación, a tal punto que su vida pasa por coleccionar autos, motos antiguas y todo tipo de reliquias. Ahora ellos son los protagonistas de un docureallity que se estrena el martes 6 a las 23hs. en Discovery Channel. La serie es dividida en seis episodios que se emitirán los martes a las 23.00hs.
¿Familia normal?
Por un lado tenemos a Luis Carvotta, el jefe de la familia. Simpático, directo y muy amigo de sus amigos. Se autodefine como un amante de la restauración. "Yo tenía una tropa de taxis y llegó un momento donde no trabajé más. Me compré un auto antiguo y me puse a jugar con eso. Empezas y no podes parar", asegura.
Sin embargo, Luis no está solo. Lo acompañan su esposa Mirta y su hijo Diego: "Mi señora se involucró por culpa mía. Ella no tenía otra opción. En cambio mi hijo ya desde los dos años tocaba todo y hacía desastres. Él no quería estar en el colegio, prefería estar acá en el taller", recuerda Luis.
El programa a su vez gira en torno a la peculiar relación padre e hijo, quienes llevan adelante el negocio en un taller que la familia posee en Villa Adelina. "Estamos lejos de ser una familia normal. Le puedo permitir que me putee o me pelee, pero sabe cuando yo me caliento y tiene miedo".
Padre e hijo viajarán juntos por el interior del país en busca de objetos y piezas para cada restauración y para su colección de antigüedades que luego ellos mismos venden en las ferias que organizan una vez al mes. Durante el programa ambos pasan gran parte de los días juntos en el taller reparando y restaurando vehículos y es allí donde las diferencias de opinión entre uno y otro salen a la luz, dando lugar a divertidas discusiones en las cuales ambos quieren tener la razón. "La plata vuelve, el objeto ya no", asegura Luis. "Hay cosas que nos unen como salir a comprar accesorios, objetos o viajar. Igual todo gira en torno de lo mismo. Si nos vamos de vacaciones, en nuestro destino tiene que haber un desarmadero", explica Diego.
La mujer de la familia ya está acostumbrada. Mirta cuenta que "desde el inicio de su relación supe que para mi marido lo más importante son los autos y las antigüedades". De todas maneras, es quien lleva la contabilidad y pone el grito en el cielo cuando los números no cierran.
A lo largo de los episodios, podremos ver a la familia trabajando en un Ford A del año 1929, una moto Harley Davidson de 1948, un auto fórmula modelo Crespi una camioneta Chevrolet de 1962. Cada trabajo tendrá un plazo y un presupuesto acordado con el cliente y la tarea en equipo será vital.
Restauradores
Para los Carvotta, reparar autos clásicos es mucho más que una profesión. "Hace 30 años que estoy en el rubro", dice Luis mientras se limpia la grasa de las manos en un trapo. "Este taller lo conseguí en el '90 y lo nombramos Ave Fenix, simplemente porque acá a los autos me los traen hechos cenizas y resurgen. Nosotros le devolvemos la sonrisa al cliente", explica el padre, que empezó a coleccionar objetos antiguos desde la infancia y que guarda su primer álbum de estampillas que como un bien preciado.
Su hijo agrega: "Para nosotros es increíble poder darle vida nuevo a los coches". "Nos encanta coleccionar objetos antiguos también. No solo nos centramos en el auto, sino que también en todo lo que rodea como publicidades o carteles", cuenta Diego. Del taller, todo está hecho a medida de Luis y se desespera cuando algo es cambiado de lugar, el 80% de las cosas no están en venta. Son reliquías de las que no quiere desprenderse.
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